"El dilema de los erizos"

I impresión

Cada segundo, una probabilidad de un estallido... Asombra la ambigüedad de las palabras que aman y matan al mismo tiempo, qué cortan profundo sin cuidado.

Estamos en el mismo tablero, y allí nos tiramos desde flores hasta nuestras viseras, perdemos/ nos perdemos y nos declaramos la guerra en instantes de sofoque,  poesía del arraigo y la terrible cercanía, poesía un tanto enferma, decadencia de posibilidad de respirar profundo.

II round

Tomo un sector, me mantengo alerta, mi corazón se acelera cuando pienso el entornos, cuento los días,  los cuento desesperadamente, cómo si realmente supiera para qué los cuento o hasta cuándo los voy a contar, me hago nudos, los tallo hasta que estallen las empollas, y cuando asfixia demasiado, cuando tengo que hacer algo, busco en el recuento un buen instante que haga olvidar que aca estoy relegada a vivir (con todo lo que eso implica), y finalmente (o más bien temporalmente) le pierdo el sentido a las marcas, a los sinsentidos, a la falta de aire, a los no, a las palabras, al daño mutuo.

Soundtrack

Me preocupa, tengo miedo, quisiera, después de, mañana, me sorprende, no estoy segura, debería buscar, irme, quedarme, dejarlo, seguir, lapso (semestre), felicidad, angustia, dinero, sobrevivencia, vagancia, iniciativa, hacer, esperar, fluir, apegarse, desprenderse, lastimar(se)... (recortes de diálogos mientra pasa la vida)

Epitafio

Supongo que quedarme aquí significa renunciar un poco a los colores que nos quedan, a lo que nos hace abrazarnos de cuando en cuando.