¿Hay paso?

Está en verde, y me aceleró para poder atravesar la distancia, corro, dígito, envío. Está en verde, y no hay respuesta. Eco de mis palabras disueltas en el ambiente, eco de sus palabras en mi memoria. Me siento minúscula, y en un microsegundo todo es posible. Cierra los ojos, y me ve con una sombrilla que cuida mis miedos, abre los ojos y la quiebra... contengo las ganas de expulsar hasta las entrañas, se me atoran en la garganta y se me desbordan por los ojos. Siempre pasa lo mismo con esas luces. Tal vez soy daltónica, es más fácil creer que es uno, dejarlo todo en manos de uno mismo... pero no es así. Me ahoga la incertidumbre. ¡Ahhhhhh! ¡Ahhhhhhh! ¡Mierda! ¿Porqué lloro? Debería dejar de lado las luces indicadoras, crear las mías. No me gusta el llanto nocturno, lo odio, porque me hace sentir inútil en mi espacio, inactiva. Me limpió la cara y continuo, porque así es esto, porque esas cosas suceden, porque siempre pasa...